EL ABEJARUCO COMÚN O ABEJARUCO EUROPEO, merops apiaster, es un pájaro precioso de vistosos colores: vientre VERDOSO, pecho AZUL intenso, garganta AMARILLO brillante, la nuca y la parte alta de la espalda de color CASTAÑO ROJIZO, el obispillo AMARILLO, el píleo también ROJIZO, su frente es BLANCA, separada de un antifaz NEGRO que incluye los ojos, de un color ROJO vivo.
Es un migrador transahariano que viene a Europa hacia el mes de abril a sus territorios de cría y se marcha al África tropical hacia mediados de agosto. Su alimentación es a base de insectos, abejas, avispas, libélulas, moscardones… que atrapa en acrobáticos vuelos. Construye sus nidos en terraplenes, cortados, paredes verticales, márgenes de carreteras…Tiene un canto muy intenso y repetitivo, una retahíla de sonidos algo guturales que se escuchan a bastante distancia. Su silueta, posado en los cables, es inconfundible, con su pico largo y curvado y su cola puntiaguda.
NUESTRA TAPA homenajea al Abejaruco:
CON SUS COLORES: el AMARILLO del falafel árabe, el VERDE de la batata muhamsa siria, el AZUL con el que hemos camuflado una cebolleta, de origen asiático, el NEGRO de la aceituna de todos los pueblos mediterráneos, el amarillo de los nachos de América latina, el ROJIZO en la calabaza y en la remolacha que recuerda, ésta última al plato típico de la pascua judía, el “chrain”…
CON SU VIDA ENTRE DOS MUNDOS: nuestra tapa quiere ser una mezcla de culturas y colores como el pájaro africano, que vive entre continentes diferentes. Quiere ser un pequeño gesto por la PAZ, un símbolo de la unión entre los pueblos.
CON SER APTA PARA TODOS: lo pueden tomar las personas veganas, vegetarianas, celíacas, intolerantes a la lactosa…